Por Francisco Ramírez. Corresponsal
La Habana, 22 Ene (Notimex).- Intelectuales cubanos instaron a abordar a fondo el tema racial en Cuba al considerar insuficiente el alegato de que la discriminación carece de institucionalización y sólo existen “prejuicios raciales”.
Un panel de expertos compareció este jueves ante el programa Mesa Redonda, de la televisión estatal, para analizar el tema que -dijeron- requiere profundizar en la educación de niños y jóvenes para desterrar vestigios raciales.
El profesor Esteban Morales dijo que el tema del racismo es complejo y poco tratado, e indicó que debe hacerse un gran esfuerzo por eliminar los rasgos racistas ahondados durante más de 500 años en esta isla del Caribe.
El economista y politólogo dijo que en 1962 se pensó que el problema del racismo en Cuba estaba resuelto, pero “no era así y después vino un largo período de silencio sobre ese tema” motivado por el enfrentamiento con Estados Unidos.
El inusual programa de la televisora oficial se transmitió después que en diciembre pasado artistas e intelectuales locales negaron una denuncia de colegas afroestadunidenses sobre “el insensible desprecio” por los cubanos negros en la nación caribeña.
El mensaje de 60 líderes negros de Estados Unidos denunció “el aumento de las violaciones de los derechos civiles y humanos de los activistas en Cuba” con el valor de repudiar el sistema racial isleño.
La réplica al texto afroamericano sostuvo que en Cuba “los negros y mestizos han hallado, en el proceso de transformaciones emprendido en el último medio siglo, oportunidades de realización social y personal”.
Pero, al parecer, las autoridades de la isla se proponen encarar de frente el asunto y la “Mesa Redonda” -que refleja los puntos de vista oficiales sobre diversos temas- le dedicó un programa especial con el título “Una batalla cubana contra el racismo”.
Hasta ahora, el debate sobre la cuestión racial se ha limitado a espacios académicos, especializados y de la intelectualidad, entre otros sectores vinculados al mundo de la cultura.
Pero investigadores progubernamentales, opositores e independientes coinciden en que es necesario un debate social sobre el tema pues la sociedad debe reconocer el problema racial y buscarle soluciones de mayor calado.
La Oficina Nacional de Estadística sostiene que el 65 por ciento de los cubanos son blancos, el 10 por ciento negros y cerca del 25 se catalogan como mestizos.
Sociólogos isleños plantean que los negros, poco representados en la superestructura de gobierno, tienen inferiores puestos de trabajo, reciben menores ingresos, viven en las peores viviendas, son mayoría en las cárceles y una minoría en las universidades.
Una minoría de cubanos con piel más oscura se asentó en Estados Unidos en busca de prosperidad, y se estima en alrededor del 15 por ciento del total.
Por ello son el segmento poblacional que recibe menos remesas de parientes exiliados, lo que los coloca en desventaja a la hora de adquirir alimentos y otros artículos esenciales que se venden en las tiendas en divisas.
“Los negros vivimos en la marginalidad y somos muy pobres en Cuba. Es muy duro ser menospreciado por el color de nuestra piel”, dijo un afrocubano que solo dió como nombre Yosvani después que un policía se alejó tras pedirle su identificacion en la vía pública.
Según el economista opositor Oscar Espinosa Chepe, el problema racial “sólo podrá ser resuelto en una sociedad que goce de entera libertad y respeto a los derechos humanos; cuando sean eliminadas las ataduras impuestas por” el gobierno.
En el programa televisivo del jueves Pablo Rodríguez Ruiz, investigador del Instituto de Antropología, dijo que según estudios subsiste un racismo a nivel de relaciones sociales “con muy baja intensidad” a partir de “conductas estereotipadas”.
El historiador Heriberto Feraudy, ensayista de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), insistió en que las leyes cubanas “castigan” la discriminación racial, y los cubanos han cumplido “misiones internacionalistas” para ayudar a los pueblos de Africa.
Los expertos llamaron a una “batalla” contra ese problema social a través de la cultura y la educación porque “las consecuencias de la esclavitud están todavía aquí” el racismo pervive también por “imperfecciones de la sociedad actual”.
En febrero de 2003, el entonces presidente Fidel Castro reconoció ante un congreso de maestros y profesores de América Latina la existencia de discriminación racial en la isla, a pesar de que se realizó una revolución social radical en la que el pueblo alcanzó “la plena y total igualdad legal”.
En un discurso en la clausura del VIII congreso internacional Pedagogía 2003, señaló que esa segregación está asociada a la pobreza que aún afecta a negros, mestizos y hasta blancos que fueron historicamente víctimas de la miseria y la marginación.
Fonte: SDP Notícias
